EN MI CARRETERA

El salir estos días para mi fue algo relajante y bastante placentero, no fui en plan de relajo o salir a mil lugares, no. Simplemente quería disfrutar un poco del silencio, un poco de la vida simplemente.

Ayer precisamente leía a mi amiga Jana y ella escribió acerca del tiempo que tenemos que tomar para nosotros mismos, para ser honestos, creo que yo ya tenía un ratito que no me lo daba e incluso le decía que a mi me costaba un tanto de trabajo hacerlo y que más cuando tienes que estar contigo misma, escucharte y ver las necesidades que tenemos, eso me cuesta muchísimo¡¡ no saben cuanto¡¡

Pero al empezar a querer escribir de todo y de nada, medí cuenta que si me había dado un tiempo para mí. Como saben, aun vivo con mis padres y el salir es a su lado y créanme lo disfruto muchísimo, quizás porque mis padres se separaron y luego volvieron, pero creo que en definitiva es algo que me gusta hacer, y lo disfruto como enana.

Desde que salí a carretera fue como empezar a ver diferentes paisajes, el día era lluvioso, nublado, como a mí me gustan, eso para mi era garantía que las cosas estarían muy bien.

El ir en el auto ver como la gente corría para cubrirse de la lluvia (que es algo que en verdad no entiendo), el ver que poco a poco el trafico que se iba haciendo menos, el ver como el concreto se terminaba y empezaba a verse el campo, empezar esos cambios de colores de gris a verde en todas sus tonalidades, el ver como los montes se convertían en montañas nevadas, el ver como el cielo empezaba a transformarse en nubes regordetas llenas de agua, el ver como la neblina empezaba a ser su presencia, la gente ya no se preocupaba en correr en las calles, sino estaba sentada en sus entradas platicando y viendo caer la lluvia, eso me indicaba que estaba fuera de la jungla de asfalto, por fin¡¡

Pero al ir recorriendo y pasando por estos lugares, respirando, disfrutando diferentes aromas, e incluso sabores, para mi fue algo relajante, se que estoy loca, pero cuando pasaba en medio de un bosque le pedí a mi padre que se detuviera, estaba cayendo una suave lluvia, de esa que moja tu cara con frescura, y no dude, salí de mi auto, y abrí los brazos y me moje, me moje, me moje, abrí mi boca y tome agua del cielo. Quisiera poder describirles lo que pasó por mi mente en esos momentos, pero creo que esa experiencia jamás la olvidare.

Creo que el echo de darme la oportunidad de disfrutar esas pequeñas cosas, me hacen ver todo diferente, no lo niego, me quede con ganas de volver, de quedarme en cada uno de esos paisajes, en cada uno de esos momentos, pero también se que tengo una vida y responsabilidades, pero con todo esto, creo que me quedo más que claro, que tengo que ponerme un poco más de cuidado a mi misma, en lugar de preocuparme por todos los demás, tengo que estar bien “yo” para poder entonces ayudar a los demás.

Durante este viaje encontré muchas cosas, claro¡ Me encontré a mi misma¡¡ Creo que nuestras vidas son como esas carreteras con diferentes paisajes y colores, a veces soleada a veces nublada pero a fin de cuenta "nuestra vida" única e inrrepetible. Creo que mi vida es un tanto como las fotos que tome y aunque quise subir todas, no se puede... triste, verdad? Pero lo mejor se quedo grabado en mi mente y en mi corazón, lleve la mejor camara del mundo... "mis ojos".

Ahora se porque me gusta tanto la provincia, porque la disfruto tanto y porque me quiero ir de esta ciudad, no me quejo, en ella nací y me encanta, pero creo que es cierto lo que dicen de que “la tierra llama” y creo que estoy apunto de regresar a ella.